Las mantas de extinción de incendios han beneficiado significativamente al medio ambiente al reducir la propagación del fuego y minimizar la contaminación del aire. Al contener y extinguir rápidamente los incendios, ayudan a proteger los hábitats de la vida silvestre, prevenir la erosión del suelo y reducir las emisiones de carbono, mitigando así el cambio climático. Además, su uso localizado limita la necesidad de un exceso de agua y productos químicos, lo que reduce el riesgo de contaminación del agua y los costos económicos asociados. En general, las mantas de extinción de incendios ofrecen una solución eficaz y ecológica para la gestión de incendios y la protección del medio ambiente.